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viernes, 10 de junio de 2011

Captadores de Talentos

El trabajo a desarrollar por la/s persona/s o el equipo de trabajo de los clubs que tienen la responsabilidad de captar futbolistas, con el objetivo de generar expectativas de éxito a la entidad, es tarea muy complicada, difícil.



En el recuerdo, me viene a la memoria, el gran Enrique Casas, gran profesional que en la década de los 70 tuvo una gran visión y acierto en el fichaje y gestión de un RSporting que llegó a ser subcampeón de liga y copa gracias, en parte, a su capacidad de captación de talentos. Una etapa en la que gracias a su trabajo, el equipo se vio enriquecido con futbolistas nacionales e internacionales, de fuera de nuestras fronteras, que hicieron grande al equipo. Citar a todos y cada uno de los futbolistas que pasaron por su agenda, sería interminable y daría para cubrir muchas páginas de gloria. Todavía tengo en la retina al gran Enzo Ferrero Aguila, "Colorado"Killer, Doria, Maceda, Mesa, ... ...



Otro valedor de futbolistas en la entidad, fue el gran José Fernandez, que trabajo incansablemente “tragándose” infinidad de partidos y kilómetros para surtir al RSporting de los mejores peloteros de la región. Gran trabajo, constante, con cariño y amor a los colores. La década de los 80 estuvo perfectamente cubierta con su presencia en el control de esta parcela.


Con posterioridad también, pude ser testigo cercano de otra serie de gestores, no muy afortunados (evitemos citar nombres),que unos, en alguna ocasión, para cubrirse las espaldas, contrataban a todo el que hacia meritos por mediocres que fueran, vamos, que disparaba a todo lo que se movía por si acaso (se reduce el margen de error). Otros, justificando su trabajo, promocionando a jugadores de su cuerda o informes, sin importar la trayectoria o su procedencia. Alguno también que se dejaba asesorar, “víctima interesada” de los consabidos “tratantes-representantes” y que contrataban por el simple visionado de un par de videos o confiados de informes que nunca contrastaban y supervisaban.



En definitiva, un trabajo complicado, el de cuidar el futbol base, en el que lo mas importante no es acertar, sino equivocarse lo menos posible. Tener capacidad de decisión, fundada, con visión de futuro y que la variable de la suerte sea la que menos intervenga en las decisiones y en la formación del futbolista. Unas decisiones sabias, pero un seguimiento también cuidado con esmero para que ese trabajo genere sus frutos: el aprovechamiento de futbolistas para que sean profesionales, para el primer equipo o con garantías de poder hacer caja si fuera necesario.

Ya comenté la buena la ponencia a la que tuve la suerte de asistir de Albert Benaiges (Coordinador de las categorías inferiores del FCBarcelona). En una se sus múltipes experiencias, contaba como tuvo que gestionar “un problema” en el equipo que dirigía, Cadete A. En el mismo equipo contaba con dos grandes porteros: Valdes y Reina. Su solución era sabia e inteligente, jugarían dos partidos cada uno, no podía cortar la proyección de dos futbolistas que prometían gran futuro para el Club. Por aquel entonces, Serra Ferrer (Coordinador Deportivo) le comunicó que tenía que decantarse por un portero para jugar titular. Albert, sabio y diplomático, supo elegir el camino que le interesaba y que entendía que era mejor para los intereses de todos. En aquella temporada, el entrenador del primer equipo era Louis VanGall y de manera casi informal, le comentó la problemática que se le presentaba. El entrenador del primer equipo le sugirió a Serra Ferrer, que la mejor solución era poner a los dos porteros dos partidos cada uno. El mallorquín, tal y como hacen muchos en la adjudicación de meritos y medallas, le comentó a Albert: “…sabes, lo estuve pensando y… es mejor que jueguen los dos porteros un par de partidos cada uno”. La anécdota es curiosa y al final tuvo sus frutos, el destino y la suerte hace o deshace también que muchas decisiones que se adoptan, tenga acierto o fracaso. La historia del futbol está llena de casos futbolísticos de aciertos, errores, mala suerte, desengaños, … …



La reflexión final, viene con lo acontecido esta semana con un portero del Roces cadete José Aurelio Súarez que se va al Barcelona (hijo de mi gran amigo y compañero de estudios Jose Aurelio, jugador de las categorías inferiores del Sporting, Oviedo, … …).

Está claro que para que en el futuro exista capacidad de acierto con furutos futbolistas, hay que poner los medios. Es una tarea difícil  que en ocasiones aparece, en otras se capta, algunas se cuidan y otras se miman para que de resultados.
Es una pena que se "escapen" proyectos, que se valla buscando su futuro lejos de su casa porque se decida a la liegra o no exista control en la gestión. Por añadidura, el beneficio será para nuestros competidores deportivos, se nos escaparan talentos fuera de nuestras fronteras regionales y harán carrera en otros equipos con los que nos enfrentemos.

Sabemos que en el Club se dispone también de porteros con gran proyección, pero que dejemos “escapar” a otro, no es una decisión sabía, ni inteligente, ni lógica. Hay que tener un amplio abanico de soluciones para que todos puedan tener una buena progresión, pero para eso hay que disponer de intenciones y de lo mas importante a veces, aplicar lógica y sentido común, pero para eso la genética, la formación, la capacidad, ... cobra un papel importante en las personas responsables.


La persona que tenga esa responsabilidad, debe de tener un perfil claro y concreto. Amante del Club, conocedor de su historia, sus valores y su destino. Fiel conocedor del día a día del futbol base cercano a la entidad. Persona capaz de intuir y transmitir confianza en su grupo de trabajo. Trabajador constante con buenas relaciones entres todos los clubs de formación y estamentos. Capaz de poder generar y seleccionar un grupo de trabajo competente, implicado y unido por el mismo fin. Una persona que arrope a los jóvenes valores, dándoles una formación humana que irá de la mano de la estrictamente profesional o deportiva. Lider que enganche a su grupo de trabajo con el mismo entusiasmo, sabiendo practicarlo y transmitirlo. Una persona que sepa coger los caminos que mas interesen al Club.


Tenemos esos perfiles? Cuidamos a los formadores? Tenemos a los profesionales adecuados en cada parcela? Si las respuestas han sido afirmativas, no debemos de preocuparnos del futuro del RSporting. Si por el contrario son negativas y los que conforman estos grupos de trabajo son personas que no van a aportar nada, que su perfil no se ajusta con el objetivo final, que van a ser estómagos agradecidos, vasallos cumplidores de sus fieles amos que nunca les harán sombra, entonces, si que nos tendremos que preocupar.







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