· Los defensores, tras haber sufrido un acoso y ataque rival, se sienten relajados y periten la concentración mantenida durante ese determinado tiempo.
· Esos momentos pueden ser aprovechados por el atacante para alejarse de ellos y estar desmarcados en la siguiente jugada de ataque.
· Concentración para que, en caso de ataque, poder ganar distancia e iniciativa en el juego.
No hay comentarios:
Publicar un comentario